Es muy sencillo. Cuando hayas terminado con tu botella de lejía usa ese plástico. Cortalo en pedazos, del tamaño que quieras de 5cm o hasta 15cm. En la foto podéis ver los cortes que yo he conseguido de una botella. La base la dejaremos sin cortar, para tener un recipiente de agua, en el que pondremos agua y jabón. En mi caso he reservado también la zona del tapón, como una segunda trampa de agua.
Porque cortar el plástico en cuadrados. Puedes hacerlo en forma de flor, o hacer un molinillo, o en forma de sol o un animal que te guste.
¿Te sientes mágica?
Puedes colocar runas en las trampas, dibujándolas con ceniza o con un rotulador.
El aceite lo puedes canalizar para que sea aún más efectivo.
O colocar en el aceite minerales de protección como ojo de tigre, entre otros.
¿Usas los colores en magia? También puedes usarlos para las trampas cromáticas
-Amarillas: pulgones (áfidos) y dípteros (moscas), trips, minadores, ácaros, mosca doméstica, mosca de la fruta. Especialmente para la mosca blanca. (Botellas de lejía)
-Azules y moradas: es el preferido de los tríps y moscas esciaridas. (Botellas de lejía de color)
-Negras: Tuta absoluta minador del tomate, anopheles. (Botella de salfuman)
-Blancas: ácaros y mosca doméstica. (Botellas de limpieza)
Lo bueno es que estas trampas las hacemos con materiales reciclados. El aceite incluso podemos usar el que hemos usado en la cocina. Las puedes guardar y volver a usar cuando las necesites.
Con mis mejores deseos de que te haya gustado y te sea útil
Un abrazo Óscar de Rosmaris, tu brujo chamán de Lavapies
No hay comentarios:
Publicar un comentario